La ayuda de Estados Unidos a Egipto

La situación de Egipto no puede perderse de vista ya que es el termómetro de los intereses imperiales de los Estados Unidos. Mientras que en la Unión Europea se ha condenado el golpe contra el Presidente Mohamed Morsi (3 de julio del 2013), el senador demócrata norteamericano, John Kerry lo definió como la vuelta a la democracia.
 

El gobierno de los Estados Unidos ha estado otorgando importantes subvenciones al actual Gobierno surgido de un golpe militar y presionando a éste, para que el actual gobierno intente llegar a un acuerdo con los depuestos musulmanes. Sin embargo el día de ayer, anuncia que suspenderá los 300 millones de dólares que envía en ayuda financiera a Egipto, la mayoría en asistencia militar y hoy el portavoz del Consejo de Seguridad de la Casa Blanca, Caitlin Hayden, dice: "Las informaciones acerca de que vamos a suspender la asistencia militar a Egipto son falsas". Antes, un funcionario estadounidense dijo que el Gobierno estaba evaluando la posibilidad de negar la mayor parte de la asistencia militar a Egipto, a excepción de la ayuda para promover las medidas antiterroristas, la seguridad en la Península del Sinaí y otras prioridades nacionales. El funcionario dijo que el Presidente Barack Obama aún no había tomado una decisión final sobre un asunto que ha molestado a autoridades estadounidenses, que se debaten entre el deseo de ser considerados promotores de la democracia y los derechos, y el deseo de mantener cierta cooperación con los militares en Egipto.
 

Sin embargo, resulta lógico pensar en la posibilidad de la “suspensión”. El gobierno del presidente Barak Obama atraviesa graves problemas financieros, entre otros destaca la paralización parcial de la administración federal.
 

Ya es hora de que el pueblo norteamericano despierte ante el caos de la administración del  Sr. Obama, cuyos intereses responden al complejo militar estadounidense por encima de los intereses del pueblo norteamericano.
 

El gobierno norteamericano debería concentrar sus fuerzas y energías en superar  sus dificultades. Tal y como el mismo ha declarado: "EE.UU. no podrá cumplir con sus obligaciones financieras por primera vez en 200 años. Será como una bomba nuclear".

Ocúpense de poner orden su casa, ajustar sus finanzas y responder a las necesidades del pueblo norteamericano antes de dictar cátedra sobre  “democracia” al resto del mundo.